Miguel Murillo es maestro, escritor y dramaturgo. Desde 1995 es director del Consorcio López de Ayala-Badajoz, desde donde organiza el Festival Internacional de Teatro y Danza Contemporáneos de Badajoz.
Nos ha acompañado desde los inicios Del Plan con dos obras: «Armengol» y «Adaptación teatral del Lazarillo de Tormes». La primera, ganó el Premio Lope de Vega en 2002 y fue estrenada en el Teatro Español de Madrid en 2005 dirigida por Esteve Ferrer. Armengol está basada en un hecho real que aconteció en Badajoz en 1936. La historia del Lazarillo es bien conocida por todos, pero Miguel Murillo la pone en labios de una compañía de cómicos quienes cuentan la vida de Lázaro desde que tenía ocho años hasta que se casa en Toledo y ejerce el oficio de pregonero. En 2009 fue galardonado con la Medalla de Oro de Extremadura.
Son muchos años y muchos pueblos, y muchos libros arropando nuestras charlas, dando olor , textura, y brillo a esas salas entrañables de bibliotecas municipales. Decía Cortázar que el mejor lugar para estar seguro en casa es en los libros. En casa y en los pueblos, y en las ciudades: el lugar más seguro, cálido y personal. En una tarea que para mí, autor de teatro, supone un añadido no baladí: hacer que el texto de mi obra tome cuerpo, se materialice en el cerebro del lector con las tres dimensiones escénicas. Y se consigue. Con la charla, con las preguntas y respuestas, con el interés de cada uno de los lectores y lectoras que consideran no sólo al libro como amigo, sino al autor. Así me he sentido muchas tardes y muchas noches. He conocido a mucha gente y me han enseñado aspectos de mi obra que jamás pensé que encerrara. He conocido el trabajo de personas entregadas al libro: bibliotecarios y bibliotecarias a los que debo el honor de haberme hecho visible ante sus lectores. Y sé que al igual que mis obras tienen un hueco en los anaqueles de esas bibliotecas, yo tengo un hueco en el corazón y en la memoria de sus usuarios.
Gracias a quienes se emocionaron conmigo: a la mujer que salvaba la soledad leyendo, al chico que viajaba acompañado por autores universales, a quien buscó el amor siguiendo el ritmo de una escena amorosa, a quien rompió las cadenas con versos prohibidos antaño, a quien aprendió a escribir cartas de amor… Gracias a todos.
Miguel Murillo Gómez
Dramaturgo
